Carlos Pérez
(V&L)
De acuerdo al diario El Informador de México, a 10 días de la tensión política que suponen las históricas expulsiones de embajadores estadounidenses de Bolivia, primero, y de Venezuela después, con la inmediata réplica por parte del Departamento de Estado que adoptó la misma estrategia, no ha salido a la luz cuál fue el origen de la crisis diplomática.
Los presidentes Evo Morales y Hugo Chávez presentaron sus decisiones como medidas preventivas para evitar golpes de Estado, en los que estarían involucrados los diplomáticos Philip Goldberg, en La Paz, y Patrick Duddy, en Caracas.
En el caso de Bolivia, Goldberg, habría actuado en consonancia con funcionarios de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), asentados en el país, para apoyar y financiar a grupos y partidos políticos de derecha, en los que militan los prefectos rebeldes, para desestabilizar al Gobierno.
Ni La Paz dio mayores presiones, más allá de la declaración previa de “persona non grata” a Goldberg, sobre los detalles que contemplaría el plan, ni tampoco el Departamento de Estado, cuya jefa es Condoleezza Rice, respondió a estas acusaciones..
Rice tampoco respondió a una carta que un grupo de 90 intelectuales le hiciera llegar, el viernes, a ella y a los candidatos presidenciales.
La carta incluye firmas de 90 académicos de universidades como Harvard University, American University, Duke University, “Johns Hopkins” University, University of California-Davis, Queens College, New York University, y Purdue, entre otras, en la que los intelectuales solicitan explique cuál fue el accionar de Goldberg en La Paz.
Tampoco hubo precisiones, ni respuestas más allá de las expulsiones por parte de Washington, al supuesto plan desestablizador en Caracas, que supuestamente urdía Duddy en consonancia con líderes empresariales contrarios a la política estatista de Chávez.
A 10 días de la crisis diplomática, los ejes de los conflictos político-sociales en Bolivia y Venezuela tienen que ver, más allá de estos intentos no develados, con visiones diferentes de modelos de país entre sus gobiernos y las heterogéneas fuerzas de oposición.
Militantes afines a Evo Morales ganan la calle, fusil en mano, para defender el orden institucional, ante las supuestas presiones desestabilizadores de los prefectos.
El buque misilístico ruso “Pyotr Velikly”, según anuncia Caracas, participará de maniobras conjuntas con la Marina venezolana, a fines de noviembre.
(V&L)
De acuerdo al diario El Informador de México, a 10 días de la tensión política que suponen las históricas expulsiones de embajadores estadounidenses de Bolivia, primero, y de Venezuela después, con la inmediata réplica por parte del Departamento de Estado que adoptó la misma estrategia, no ha salido a la luz cuál fue el origen de la crisis diplomática.
Los presidentes Evo Morales y Hugo Chávez presentaron sus decisiones como medidas preventivas para evitar golpes de Estado, en los que estarían involucrados los diplomáticos Philip Goldberg, en La Paz, y Patrick Duddy, en Caracas.
En el caso de Bolivia, Goldberg, habría actuado en consonancia con funcionarios de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), asentados en el país, para apoyar y financiar a grupos y partidos políticos de derecha, en los que militan los prefectos rebeldes, para desestabilizar al Gobierno.
Ni La Paz dio mayores presiones, más allá de la declaración previa de “persona non grata” a Goldberg, sobre los detalles que contemplaría el plan, ni tampoco el Departamento de Estado, cuya jefa es Condoleezza Rice, respondió a estas acusaciones..
Rice tampoco respondió a una carta que un grupo de 90 intelectuales le hiciera llegar, el viernes, a ella y a los candidatos presidenciales.
La carta incluye firmas de 90 académicos de universidades como Harvard University, American University, Duke University, “Johns Hopkins” University, University of California-Davis, Queens College, New York University, y Purdue, entre otras, en la que los intelectuales solicitan explique cuál fue el accionar de Goldberg en La Paz.
Tampoco hubo precisiones, ni respuestas más allá de las expulsiones por parte de Washington, al supuesto plan desestablizador en Caracas, que supuestamente urdía Duddy en consonancia con líderes empresariales contrarios a la política estatista de Chávez.
A 10 días de la crisis diplomática, los ejes de los conflictos político-sociales en Bolivia y Venezuela tienen que ver, más allá de estos intentos no develados, con visiones diferentes de modelos de país entre sus gobiernos y las heterogéneas fuerzas de oposición.
Militantes afines a Evo Morales ganan la calle, fusil en mano, para defender el orden institucional, ante las supuestas presiones desestabilizadores de los prefectos.
El buque misilístico ruso “Pyotr Velikly”, según anuncia Caracas, participará de maniobras conjuntas con la Marina venezolana, a fines de noviembre.
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