Carolina Sanz (V&L)
Se acabaron en Venezuela las fiestas con whisky y las camionetas y celulares último modelo a cargo de las arcas públicas. Ocho años después de llegar al poder, Hugo Chávez, el creador del “socialismo del siglo XXI”, anuncia que ha llegado la hora de poner freno al gasto público.
Ayer declaró que piensa “acabar con los megasueldos” de los directivos de las empresas estatales y que eliminará de forma “definitiva” los gastos en “teléfonos, vehículos y festejos” de la cada vez más inflada administración pública y en un país donde depende un 40 por ciento de la exportación de petróleo, actualmente a la baja.
“Hay que disminuir los costos, acabar con el derroche, acabar con la corrupción y el gasto innecesario, acabar con los megasueldos”, declaró.
El ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, afirmó que el presupuesto nacional de 2009 será “austero” en comparación a los 63.9 mil millones de dólares del actual.
“En este nuevo presupuesto se eliminarían muchísimos gastos como: en cierto tipo de vehículos, en celulares, festejos. Hay mucho donde eliminar”, declaró Rodríguez.
La inflación más alta. Venezuela registra una espiral creciente de inflación que llevó la tasa acumulada, hasta agosto pasado, al 19.4 por ciento, la más alta de la región. Economistas locales atribuyen el fenómeno al supuesto exceso de gastos públicos, entre otras razones.
Según el ministro de Finanzas, “debe haber una persistente campaña hacia la población, hacia el ahorro, la austeridad, hacia la eliminación del dispendio. Porque la mentalidad que ha prevalecido es la de [que la venezolana es] una sociedad rica, cuando, en realidad, no lo es”.
Se acabaron en Venezuela las fiestas con whisky y las camionetas y celulares último modelo a cargo de las arcas públicas. Ocho años después de llegar al poder, Hugo Chávez, el creador del “socialismo del siglo XXI”, anuncia que ha llegado la hora de poner freno al gasto público.
Ayer declaró que piensa “acabar con los megasueldos” de los directivos de las empresas estatales y que eliminará de forma “definitiva” los gastos en “teléfonos, vehículos y festejos” de la cada vez más inflada administración pública y en un país donde depende un 40 por ciento de la exportación de petróleo, actualmente a la baja.
“Hay que disminuir los costos, acabar con el derroche, acabar con la corrupción y el gasto innecesario, acabar con los megasueldos”, declaró.
El ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, afirmó que el presupuesto nacional de 2009 será “austero” en comparación a los 63.9 mil millones de dólares del actual.
“En este nuevo presupuesto se eliminarían muchísimos gastos como: en cierto tipo de vehículos, en celulares, festejos. Hay mucho donde eliminar”, declaró Rodríguez.
La inflación más alta. Venezuela registra una espiral creciente de inflación que llevó la tasa acumulada, hasta agosto pasado, al 19.4 por ciento, la más alta de la región. Economistas locales atribuyen el fenómeno al supuesto exceso de gastos públicos, entre otras razones.
Según el ministro de Finanzas, “debe haber una persistente campaña hacia la población, hacia el ahorro, la austeridad, hacia la eliminación del dispendio. Porque la mentalidad que ha prevalecido es la de [que la venezolana es] una sociedad rica, cuando, en realidad, no lo es”.
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