El coordinador nacional de Primero Justicia, Julio Borges, recordó la promesa presidencial de construir para este año 150.000 viviendas. Indicó que para este domingo, se debieron entregar 46.854 viviendas. “Esa fue la promesa que reiteró Aristóbulo Istúriz, la promesa del Presidente quien dijo poner todo su honor y nombre en esta promesa. Hay que ver por qué no se terminan estas casas y no se construyen más viviendas en Venezuela, vamos a hablar de la cantidad de recursos que han entrado al país durante estos doce años y como esos recursos no son destinados a resolver los problemas de la gente”, enfatizó.
En este sentido, Borges alertó sobre cómo el Presidente de la República ha concentrado en sus manos la mayoría del inmenso ingreso petrolero que ha tenido Venezuela.
“Pareciera que el Gobierno todo se lo devora y nada le es suficiente. A principios de este año, devalúo el bolívar y con eso se multiplicó sus ingresos a costillas del pueblo venezolano, luego nos amenazó con una subida del IVA”, dijo.
El parlamentario señaló que “no contento con eso, le pidió más dinero prestado a los chinos, sin haber terminado las obras del metro y el ferrocarril que debía terminarse con el préstamo a los chinos”.
No conforme con esto el Presidente ahora le exige a PDVSA que el dinero de la estatal petrolera que podría ser invertido para aumentar su producción totalmente destruida, sea entregado al Gobierno en el decreto raspa la olla de esta Semana Santa, por medio del cual se estableces umbrales en los cuales PDVSA debe entregar hasta 95% de sus excedentes de precios”, explicó.
Agregó: “Calculando el precio del petróleo a 90 dólares por barril, esto significa que el Gobierno podría tener unos 15 mil millones de dólares de ingresos que, el Presidente puede gastar sin rendir cuentas a nadie”.
El líder de la tolda amarilla colocó como ejemplo el FONDEM. “Se sabe que en esa alcancía entraron casi 70 mil millones de dólares y se dice que quedan cerca de 5.000 millones de dólares, pero no se tiene idea cierta en que se gastaron”.“¿Será en juguetes militares, regalos a otros países, corrupción? Todo es posible porque se sabía que parte de ese dinero por ejemplo era para resolver el problema eléctrico, pero todos conocemos que la crisis en este sector continúa”, indicó.
Borges aseveró que “desde el año 2004, en Venezuela hay dos presupuestos: uno legal y aprobado en la Asamblea Nacional que este año está calculado a 40$ el barril y otro presupuesto que tiene cerca de 10 gavetas, el cual se alimenta de todo lo que entra a Venezuela por encima de los 40$ el barril y que se gasta como una partida secreta: sin control, sin rendir cuentas y de espaldas a la gente”.
“Otro de los castigados por este manejo discrecional son los gobernadores y alcaldes, ya que todo ingreso adicional de Venezuela pasa a las manos del presidente”, comentó.
Borges resaltó que “la Asamblea Nacional tiene la obligación de invitar y preguntarle a los ministros en qué se está gastando toda esta gigantesca partida secreta, esta caja negra que tiene ahora todo el excedente del ingreso petrolero, para que se le rindan cuentas al país”.
“Ese dinero no le está llegando al pueblo, sólo crea la ilusión de una economía mejor, pero no es una economía que está produciendo empleo, ni generando inversión, ni dando más oportunidades, ni más servicios, sino que todo se lo gasta el gobierno como quiere”, afirmó. ACN
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